miércoles, 28 de noviembre de 2007



Quizás te diga un día que dejé de quererte,
aunque siga queriéndote más allá de la muerte;
y acaso no comprendas, en esa despedida,
que, aunque el amor nos une, nos separa la vida.

Quizás te diga un día que se me fue el amor,
y cerraré los ojos para amarte mejor,
porque el amor nos ciega, pero, vivos o muertos,
nuestros ojos cerrados ven más que estando abiertos.

Quizás te diga un día que dejé de quererte,
aunque siga queriéndote más allá de la muerte;
y acaso no comprendas, en esa despedida,
que nos quedamos juntos para toda la vida.


José Ángel Buesa, Poema



Adelantándose en el tiempo, apresurándose en el espacio.. ha caído el último grano de arena de este reloj que ha presidido mi vida, que ha acompañado a mis latidos, que ha regido mis horas y me ha acunado cada noche. Lo que era una cuenta atrás hacia la alegría, hacia la promesa soñada y añorada, se ha convertido en una brusca llegada a ninguna parte, un final abrupto, un desconcertante vacío, una helada certeza de estar en una meta desierta, donde no te aguarda nadie.
Ya no queda arena que caer, marcándome el dulce ritmo, a veces tan amargo, a veces tan delicado, a veces tan veloz del tiempo, el inquieto, imparable tic-tac de los minutos eternos y expectantes, de los segundos interminables y esperanzados...

Este reloj no marcará ya nunca la hora de encontrarnos.


Me creerá alguien si digo "Buenas noches"?



Banda sonora que disfrace este silencio tan denso, tan espeso, y esta horrible sensación de hundirme en arenas movedizas:







5 comentarios:

juan de mairena dijo...

A veces, amiga mia, con la confianza que dar considerarte mi amiga, me dan ganas de mandarte a tomar por culo.
A veces mi propia sangre me impide advertir, notar siquiera, la sangre de los demás.
¿Ves porqué nunca me atrevo a pasar más alla de "los santos"?
¿Ves el porqué de los miedos?
¿Ves porqué el interés de no acabar nunca el camino?
Dejadme andar, dijo el peregrino, en la meta ni siquiera pienso.

juan de mairena dijo...

Con todo... ya sabes... me gustaría poder prestarte mi hombro, hacerte un ovillito, darte abrigo en mi puerto.
No olvides en cualquier caso que detrás de las nubes siempre está el sol.
Y si es por hacerte reir... también te presto mi nariz de payaso, mi vida de payaso, mis principios de payaso, mis lágrimas de payaso, mis risas de payaso...

Sofía dijo...

...Per construir un bell somni
cal a més a més ser prou eixerit
-quan es gira la fortuna-
per sortir d'entre les runes
i fer-ne un altre, tot seguit.


Nada cura las heridas como un sueño hermoso, por el que arriesgamos la vida, que nos da la vida, que nos ayuda a cruzar a través de los días y las noches.

Por eso, cuando los sueños se nos rompen, hay que apresurarse a poner los cimientos de uno nuevo. Porque mientras soñamos, mantenemos la esperanza, y vivimos.

Buenas noches, corazón. Mis brazos te anhelan. Será pronto, lo prometo. Y brindaremos por los nuevos sueños.

Anónimo dijo...

Llego tarde; al parecer siempre llego tarde o no llego.

Pero por si todavía no es demasiado tarde, me gustaría ofrecerle mi apoyo. También el pequeño consejo -y yo soy el menos indicado para aconsejar- de que no se deje hundir por lo que quiera que sea que la desazona tanto.

Y qué sé yo; la leo así y no sé qué decirle. Lo siento.

RAF

Pigmalión dijo...

Seguramente que yo sea aquí el que mantiene la mayor desproporción entre lo que lee y lo que comenta.

Pero me resulta imposible no decir algo llegado a este punto. Seré muy muy breve.

¡¡¡¡UFF!!!!